Hace unos años estuve trabajando en un centro de discapacitados en la ciudad donde vivo. Allí pasé unos años muy felices, y conocí personas realmente increíbles y estupendas de las cuales he aprendido mucho.
Allí se trabajaba muy duro, pero el trabajo se compensaba con la unión que teníamos todos los compañeros y con la satisfacción del deber bien hecho, pues puedo decir que en aquéllos años había un compañerismo grandísimo y la gran mayoría disfrutábamos del trabajo que realizábamos.
De vez en cuando nos reunimos y rememoramos tiempos pasados. Algunas todavía siguen trabajando allí y son el lazo de unión a todo aquello que con añoranza recordamos las que ya no estamos allí.
En los tiempos que corren en los que se están perdiendo ciertos valores, es muy bonito y gratificante que sientas que a pesar del paso del tiempo, (en mi caso han pasado once años) sepas que tienes amigas que están a tu lado y notes que ese lazo de unión que había cuando trabajábamos todas juntas no se haya desvanecido.
Bueno y todo esto viene a colación, pues ayer fue una de esas reuniones de "viejas glorias" (que conste que lo de viejas lo digo con cariño), pues todavía no somos mayores, simplemente hemos pasado la época de jovencitas, y disfrutamos de una velada estupenda recordando viejos tiempos y poniéndonos al día de los nuevos acontecimientos.
Cuando llegué a casa, me puse a hacer un colgante, pues me habían traído muchas cápsulas de café, con colores muy bonitos y me apetecía hacer un colgante nuevo.
Y como veis hoy mismo lo he colgado, para que lo evaluéis y me contéis que os parece.
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